Autoridades practicamente imploran a padres que se niegan.

Ante el surgimiento de un brote que ya ha afectado a casi 400 niños a nivel nacional, y de 7 casos reportados en Illinois, se pide a los padres de familia que vacunen a sus pequeños.

Los médicos del condado de Cook instan a los padres a vacunar a sus hijos contra el sarampión después de que se informen 7 casos en Illinois. Los pediatras de Advocate Children's Hospital y Northshore University Healthsystem dicen que están enviando cientos de cartas a pacientes que se niegan a vacunar a sus hijos.

"Los pacientes no solo tienen una erupción y fiebre, pueden contraer encefalitis y los pacientes pueden morir a causa de esta enfermedad", dijo el Dr. Michael Caplan de North Shore University Health System, en una de las cartas enviadas a esos padres de familia.

Se informó que en las próximas semanas, al menos tres sistemas de salud locales – North Shore University Health System, Advocate Aurora Health y Lurie Children's Hospital - planean enviar cartas a los padres de niños que no están vacunados contra el sarampión, y dicen que sus hijos podrían correr el riesgo de contraer el virus. enfermedad y todavía se puede inmunizar.

El movimiento inusual es un reflejo de la urgencia que sienten los funcionarios de salud pública al enfrentar los brotes de la enfermedad. Una vez que se erradicó el pensamiento en los Estados Unidos, el sarampión ha reaparecido en los últimos años, ya que algunos padres se han resistido a vacunar a sus hijos.

Hace menos de dos semanas, el condado de Cook tuvo su primer caso reportado de sarampión y, más recientemente, se han producido brotes en la costa este y en California. Los casos han sido atribuidos en gran medida a las bajas tasas de vacunación en ciertas comunidades, y el martes el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, declaró una emergencia de salud pública y requirió la vacunación en ciertos vecindarios de Brooklyn.

Lurie está enviando las cartas a las familias de sus pacientes de atención primaria que tienen 16 meses o más y que no han recibido la primera dosis de la vacuna y que 7 años o más no han recibido una segunda dosis. Por lo general, los niños reciben vacunas contra el sarampión entre los 12 y 15 meses de edad y luego nuevamente entre los 4 y 6 años de edad.

Advocate y North Shore también están enviando las cartas a las familias con niños menores de 18 años que no han recibido ambas dosis.

Advocate seguirá tratando a los niños que no reciben vacunas, hace varios años se implementó una política para notificar a las familias de pacientes nuevos que el sistema está comprometido a vacunar a los niños y las familias que no quieren que sus hijos sean vacunados, tal vez quieran cuidado en otro lugar.

Lurie también continuará cuidando a los niños cuyos padres se niegan a vacunarse, pero el sistema recomienda encarecidamente a los padres que vacunen a sus hijos.

Como se sabe, algunos padres rechazan las vacunas porque les preocupan los efectos secundarios a corto plazo, como el dolor de la inyección o la fiebre. A otros les preocupan los efectos a largo plazo, como el autismo, aunque se ha demostrado que las vacunas no causan el autismo.